TORRE EIFFEL

Al salir de la parada de metro Trocadero, alcanzamos un excelente mirador para admirar la belleza y magnitud de la torre Eiffel. El símbolo emblemático de la ciudad, el icono, el referente. Da igual el adjetivo calificativo usado. La majestuosidad de esta torre de metal es algo conocido a nivel mundial.

En la explanada típica como mirador, se sitúa el palais de Chaillot, sede del Teatro Nacional de Chaillot que comprende varios museos abarcando un área de 55.000 metros cuadrados en total. El palacio consiste en dos alas curvas de 195 metros que se unen en una explanada rodeando una gran plaza central, bordeada por estatuas de bronce y fuentes que miran al río Sena. Bajando las escaleras se accede a los jardines de Trocadero donde destaca la fuente de Varsovia. Realmente desde cualquier punto las vistas de la torre Eiffel son un lujo.

La mole de hierro está ubicada en el distrito número VII. Evidentemente subimos mediante ascensor hasta la tercera y última planta. No hay que decir mucho sobre la panorámica desde una altura tan alta.

París desde el cielo con imágenes insuperables. En cuanto a datos, fue construida por Gustave Eiffel y es una enorme estructura metálica que pesa unas 10.000 toneladas. La altura, originalmente de 300 metros, es actualmente de 324 metros, incluida la antena de radio y televisión que fue añadida mucho después. Para subir a la segunda planta hay que subir la friolera de 1.665 escalones y anualmente es visitada por 6 millones de turistas.

Seguimos paseando por el lado contrario a la torre para adentrarnos en los jardines de Campos de Marte que finalizan en la escuela Militar, es donde normalmente los cadetes realizan desfiles.

LOUVRE

El camino lógico pasa por les Invalides, un imponente edificio del siglo XVII que alberga hoy en día el museo del ejército. En el interior se encuentran los restos de Napoleón Bonaparte y su conjunto arquitectónico destaca por la dorada cúpula (el domo) de la capilla de San Luis.

Pasamos por encima del rio Sena atravesando el puente Alexandre III, el más bello y largo de París de estilo de la Tercera República francesa. En una orilla encontramos el monumento anterior y en la otra, el grand y petit Palais. Un marco bastante potente con el estupendo río como invitado.

En metro aparecimos en el museo del Louvre. Tampoco hay que hablar demasiado de uno de los museos más importantes y famosos del planeta situado en el distrito I de la capital francesa. Evidentemente arte hay a raudales, pero la mayor obra seguramente es la Gioconda, o más bien «mona lisa», del autor italiano Leonardo Da Vinci.

A las puertas del museo está la conocida pirámide, y en la parte interior, una pirámide invertida. Al salir en plena noche todo estaba iluminado de un color naranja estupendo.

PASEO EN BARCO

Por rue Rivoli, paralela al Sena, acabamos en el pont Neuf. Trayecto nocturno con la ciudad de la luz iluminada. ¿Qué observamos?. A destacar la torre Eiffel, el Louvre, el museo Orsay, la Concordia y posteriormente la catedral de Notre Dame, la Conciergerie y los puentes más destacados como son el Sully, Marie y Louis Philippe.