MEIRINGEN

Con las predicciones del tiempo era imposible y una tontería visitar zonas de media o alta montaña porque había mucha niebla y nubes bajas.

De todos modos, la jornada a la postre sería genial alternando los contenidos. El paisaje al conducir por carreteras suizas es espectacular y entretenido, en este caso el lago de Thun y Brienz son de gran belleza.

Empezamos a circular hasta Meiringen. Una bonita población a orillas del río Aare con atractivos naturales de interés general. Aquí cambiamos dinero en un banco que es la mejor opción para no perder dinero en comisiones absurdas. El personaje de Sherlock Holmes creado por Arthur Conan Doyle, es de fama en el contorno y de hecho el siguiente destino sería la cascada Reichenbach, donde fue asesinado en un punto concreto. Parece una tontería pero este detective es una gran atracción para la gente local.

Un cremallera asciende a la parte alta de la cascada con sensación de verdadero vértigo. Tiene una inclinación brutal y arriba la cascada y el paisaje merece mucho la pena. Se pueden hacer rutas de senderismo y admirar la cascada desde otros puntos más altos. Conviene comprar entrada conjunta junto con la garganta del río Aare y ahorrar unos francos.

Posteriormente visitamos la garganta del río Aare. No es demasiado larga aunque tiene puntos estupendos para ver la fuerza del agua y la erosión que ha ejercido en las rocas. Tiene una cascada y alterna partes estrechas con partes más amplias. De alguna manera recuerda a la garganta Vintgar de Eslovenia, aunque creo que esta última tiene más belleza.

En estos territorios es normal ver cascadas a modo de «cola de caballo» que bajan desde la montaña y un absoluto paraíso en días posteriores.

Aquí aparecen distintas opciones interesantes de itinerario como Lucerna o el puerto de Grimselpass o Sustenpass para seguir el camino de viaje.

LAGO DE BRIENZ Y DE THUN

Seguidamente para comer y descansar un rato paramos en la población de Brienz, con casas típicas de madera a los pies del lago Brienz con un pequeño puerto donde realizar excursiones a otras localidades vecinas. Aquí también hay un cremallera que sube a otro pico donde realizar de nuevo cientos de actividades, así es Suiza. En cada sitio han habilitado un medio de transporte para subir a las montañas y no es broma.

Dicen que hay una calle que es la más bonita de Europa en el pueblo, pero no voy ni a poner el nombre porque no es cierto.

Cerca están las cascadas de Giessbach, verdaderamente impresionantes y a las que se puede acceder por debajo a través de una pasarela. Están en un bosque donde hay un hotel de lujo que dispone de su propio cremallera hasta el lago. Por desgracia, hay que pagar aparcamiento casi en todas partes y hay controladores que denuncian, así que cuidado de no tener que pagar un multón enorme viendo los precios que gastan los suizos. Las cascadas son sin duda alguna una maravilla natural que no hay que pasar por alto.

Para finalizar la intensa jornada, por recomendaciones en foros, aparecimos primeramente en otra pequeña población a orillas del lago como es Iseltwald. Todo perfecto en armonía, silencio y tranquilidad casi perpetua.

Todo está conjuntado, el lago, las casas de madera perfectamente alineadas, vacas pastando en el verde prado y todo rodeado de bosques con arboles, montañas escarpadas y nevadas en la parte alta. Un remanso de calma y evidentemente es apetecible un paseo y recorrer sus calles.

Es como si estuviera pintado en un cuadro, algo como se diría en un argot más de escritor, bucólico.

Como último colofón a una jornada tan intensa y especial, acabamos en una ciudad que significa un bonito alto en el camino como es Thun.

La silueta del castillo y de la Iglesia es muy atractiva incluso en la distancia. El centro con el río Aare donde incluso hay fuerza suficiente para surferos, recrea una bonita imagen. Aquí hay como una especie de pasarela de madera que en verano luce con flores y es otra bella y característica imagen de pueblos suizos junto con banderas por todas partes.

Un ambiente muy agradable en todo Thun con gente en las terrazas en una ciudad con todo lo básico y necesario para vivir la vida a un buen nivel.

Uebeschi -> Meiringen -> 62 km

Meiringen -> Brienz -> 14 km

Brienz -> Giessbach -> 6 km

Giessbach -> Iseltwald -> 13 km

Iseltwald -> Thun -> 40 km