De nuevo en otro viaje por tierras de África, en este caso ante un coloso del turismo como es Egipto. Luna de miel para abarcar nueve días y por tanto ocho noches de viaje, un destino inolvidable. El mayorista en Egipto es Galaxya Tours, todo un referente y que ha sobrepasado con creces las expectativas. El viaje fue contratado en una agencia de la localidad de Arenys de Mar (Barcelona), en este caso Kaluma que tiene también el nombre de Sakkara, trabajan por internet. Muy buena gestión y atención en general, todo indica que son especialistas en viajes a Egipto y tiene un gran volumen de negocio.

Cualquiera que siga la página web, es consciente que todos los viajes que realizamos son organizados y diseñados por cuenta propia, es la mejor manera de viajar bajo un punto de vista humilde. Pero en este caso, en un país como Egipto, es quizás más cómodo y no hay una diferencia de precios tan grande en hacer un viaje organizado y evitar así ciertos problemas, molestias y agobios. A pesar de los típicos contratiempos que surgen en este tipo de viajes como visitas a tiendas, horarios fijos, ir en grupo, etc… todo ha resultado genial.

LUXOR

El primer día de viaje es una jornada tediosa de traslados, aeropuertos y aviones. Vuelo de Barcelona a la capital de Egipto, El Cairo, con la compañía Egyptair con comida incluida. Poco más de cuatro horas de recorrido para alcanzar una conexión con otro vuelo hacia el sur del país, hasta la ciudad de Luxor. En el aeropuerto compramos una tarjeta de móvil por 20 € con 15gb de datos que cumple una gran función a pesar de que las llamadas y videollamadas por WhatsApp están restringidas. Una hora de viaje aproximadamente para finalizar en la ciudad de los palacios y en el llamado alto Egipto, Luxor. El hotel de pernocta es el Sonesta St George, situado en un edificio gigante con una excelente habitación y variado desayuno en la misma orilla oriental del río Nilo.

TEMPLO DE DENDERA 

Al ir con viaje organizado, no hay que preocuparse de traslados, guías ni de nada en absoluto. Ahora bien, prácticamente a diario hay excursiones y tanto el tiempo como el calor aprietan, así que hay que madrugar bastante. El templo de Dendera está ubicado cerca de Qena, a más de ochenta kilómetros al norte y cerca de una hora y media de viaje por carretera que no deja indiferente a nadie, cualquier imagen es digna de estudio, mucho más si es la primera vez en África.

Espera la primera visita a un templo de estilo grecorromano y en este caso dedicado a la diosa Hathor, diosa del amor y de la fertilidad, una divinidad especial con el rostro de la diosa con orejas de vaca. En esta ocasión estamos ante uno de los templos mejor preservados donde destaca el edificio principal, con unos techos increíbles de color azul y con signos del zodiaco.

Es imposible explicar todo el significado del templo, pero hay imágenes inolvidables que cada día son repetidas en la mayoría de templos. Como por ejemplo, el disco solar con dos cobras y en ocasiones alado que hay siempre en la parte superior de cualquier puerta como elemento de protección. La cobra nunca cierra el párpado, así que siempre ostenta el poder de la vigilancia.

La sala principal es la más admirada, con 24 columnas de 15 metros de altura con la imagen de la diosa Hathor en los cuatro lados de cada columna. Espectacular. Incluso existe la opción de acceder a la planta superior, a la azotea, donde en una sala hayamos el antiguo zodiaco de Dendera, aunque no es original. El único inconveniente aunque tiene una explicación que forma parte de la historia, es que muchas techos del recinto están quemados debido a que habitaron cristianos y quemaron muchas estancias.

Por ser el primer templo del itinerario, además de no estar incluido en la mayoría de programas de cualquier viaje a Egipto, supone una visita tranquila, sosegada y relajada sin aglomeraciones. Además, observar por primera vez un templo con los jeroglíficos e imágenes esculpidas en las paredes, es algo emocionante. En efecto, nuestra diosa preferida es la llamativa Hathor. Obligatorio añadir una noche más si es posible en el viaje y alcanzar este majestuoso templo. Precio de la entrada a 120 L.E.

Toca embarcar en la motonave para al día siguiente, empezar el recorrido fluvial hacia el sur de Egipto y en sentido contrario de la corriente, vamos por el alto Egipto. Hay que explicar que la motonave está más tiempo parada que en movimiento, en realidad son cuatro noches de crucero pero navegando está sólo un par de días como mucho, el aspecto más negativo del viaje sin duda alguna. Motonave Royal Ruby. Un notable en términos generales y la comida excelente, lástima que las bebidas no están incluidas y suelen ser caras, cerveza Stella 500ml a 5 €. Al final del viaje no permiten pagar con tarjeta por problemas técnicos supuestamente, en realidad es para ganar más dinero por el tipo de cambio.

TEMPLO DE KARNAK 

Con el grupo que mayoritariamente estaremos todos los días de crucero, gente de Madrid, Barcelona y hasta de México, iniciamos la visita de la tarde para conocer dos templos de la ciudad de Luxor. A las tres de la tarde es uno de los momentos de más calor del día, cerca de 45º que son demoledores. Así que cuidado, bien hidratados y con crema protectora periódicamente para no acabar frito.

Luxor según indican, tiene 1/3 de los monumentos más importantes del mundo y 2/3 del país de Egipto, estamos ante la ciudad de los palacios, antigua capital faraónica conocida como Tebas. La primera parada es en el exuberante templo de Karnak, patrimonio de la humanidad. Estamos ante el conjunto religioso más grande de Egipto que muestra tanto el esplendor como la decadencia del arte egipcio por cerca de veinte siglos.

Templo dedicado a Amón, gran dios del Imperio Nuevo aunque hay también reconocimiento a otras divinidades. Muchos faraones fueron creando y remodelando durante cerca de dos milenios, un espacio único y lugar de culto de importancia vital para el mundo de la arqueología.

El templo está rodeado por murallas de adobe, como cualquier templo. Antes de entrar al templo aparece la avenida de las esfinges con cuarenta ejemplares, ofrendas en este caso con cabeza de carnero y que actuán como protectoras, guardianas y que tenía conexión con el vecino templo de Luxor. En este caso, a través de una amplia avenida de tres kilómetros de distancia más o menos. En un futuro hay un proyecto de rehabilitación para poder caminar a través de la avenida uniendo ambos colosos de la arquitectura egipcia.

Debido a la participación de más de treinta faraones en el complejo religioso, existe una gran complejidad y variedad en las construcciones. La parte más famosa del conjunto es la sala hipóstila, también llamada bosque de columnas con 134 increíbles elementos decorados con finura.

En el recinto es posible también encontrar por primera vez en el viaje los interesantes obeliscos, alguno que otro ha abandonado Egipto y habita, por ejemplo, en París, en la misma plaza de la Concordia.

El tiempo libre en el templo de Karnak debe acontecer el lago sagrado, que curiosamente siempre tiene el mismo nivel de agua y en teoría no tiene ninguna conexión con nada, algo misterioso. La otra gran atracción es en teoría el mayor escarabajo de Egipto, dedicado al dios Jepri, símbolo de suerte, amuleto de vida y poder. Hay que dar siete vueltas al mismo para disponer de una gran suerte. Puro magnetismo con la antigüedad, agudiza los cinco sentidos. Precio de la entrada a 220 L.E.

TEMPLO DE LUXOR

Poco a poco va entrando la tarde y el calor va disminuyendo, es de mucho agradecer que baje la temperatura porque en algún que otro momento, la visita anterior ha sido dura por el extremo calor. En esta ocasión estamos ante otro excepcional templo de nuevo en la orilla oriental del río Nilo. La parte oriental está dedicada a la vida, mientras que la parte occidental está preparada para la muerte, tal como indica el sol, no es una cuestión de azar. La salida y la puesta del sol, algo mágico.

El templo de Luxor es otra de las más apasionantes ruinas de Egipto, consagrado al dios Amón y construido durante diversas dinastías. Es el corazón de la antigua Tebas, ahora mismo instalado en pleno casco urbano y en la misma cornisa junto al río Nilo, prácticamente donde amarran las motonaves.

Hay que hablar de la avenida de los esfinges de nuevo, antes de la gran entrada al templo, en su momento con 1.400 esfinges, mitad hombre y mitad león. La avenida de tres kilómetros de largo y setenta metros de ancho, conectaba con el templo de Karnak uniendo ambos templos.

La puerta de acceso al hermoso mundo de los dioses está dotada con un gran obelisco, con cuatro babuinos en la base, cuyo gemelo, está en París, en la misma plaza de la Concordia ya que fue donado por Egipto. La entrada está también flanqueada por dos colosas estatuas que representan al faraón Ramsés II.

Posteriormente después de cruzar el pilono, emerge la puerta trasera de una antigua mezquita, que indica con claridad y de forma muy gráfica, que el templo estuvo enterrado durante mucho tiempo. Aquí está el patio del templo, otra de las salas genéricas de cualquier templo en Egipto y que otorga poder con columnas y estatuas gigantes del mismo Ramsés II.

El papiro es un elemento reflejado en numerosas columnas y relieves de los templos. Es una planta que crecía en las marismas del delta del Nilo y muy preferido por los artistas egipcios como soporte para la escritura. Pero además es utilizado como alimento y como material para fabricar cuerda, cestas y hasta calzado. Es una planta muy especial y llamativa.

Dado que el faraón Amenhotep III fue también artífice de la construcción del templo, hay salas que remontan a este personaje con una gran cantidad de columnas que enlazan las diferentes partes del templo. Hay que indicar también que en la época romana, el templo fue transformado en campo militar. Un templo que permite entender y comprender la vida en Egipto desde hace cientos de años. Precio de la entrada a 180 L.E.