FORTALEZA DE MASADA

Declarada como patrimonio mundial por la Unesco en el año 2001, la fortaleza de Masada destaca por palacios construidos por el mismo rey Herodes, edificios utilizados por zelotes judíos, sicarios a fin de cuentas y miembros de la facción más violenta del judaísmo de la época. En la base del complejo, es posible admirar los restos de diversos campamentos de la X legión de Roma.

La meseta de la cima de Masada, está instalada en el parque Nacional de Masada, en el mismo desierto de Judea y sobre una elevación de 60 metros de altura sobre la superficie del mar Muerto. Hay varias alternativas para ascender y descender. La más cómoda, práctica y habitual es a través del teleférico, aunque la más romántica a la par que cansada, es a través del denominado «sendero de la serpiente». Es sorprendente ver a persona ancianas con lesiones visibles y hasta con muletas remontar el acantilado arriba por las escaleras y el camino que va alternando entre tipos de terrenos.

Desde el centro de visitantes en la vertiente este, en el lado del mar Muerto, comienza este serpenteante sendero muy recomendado afrontarlo antes del amanecer para ver el panorama desde la cumbre en cuanto el día despierta. Una hora de dura ascensión y la mitad en caso de descender. En nuestro caso elegimos subir en teleférico y bajar caminando. Una gran experiencia.

Por el flanco oeste, desde la carretera que dirige a la ciudad de Arad, hay un desvío para alcanzar el otro centro de visitantes. Esta sería la opción lógica de acceso en caso de llegar al mar Muerto desde otros lugares más céntricos de Israel o de estar alojados en esta horrible ciudad, que en clave económica es más barato. Aquí también hay teleférico y una subida mucho más liviana que recibe el nombre de «sendero de la rampa del asedio». Por este lado hay instaladas una especie de gradas desde donde mirar el espectáculo de luces y sonidos que muchas noches ofrece la organización del conjunto dependiendo de la temporada.

La cima está congestionada de grupos de turistas de todas las partes del mundo con guías, exagerado. Decenas de pelotones de escolares gritando con profesores y hasta viajeros intrépidos en solitario explorando los restos arqueológicos de la vida en la Judea romana del siglo I. Al ingresar en el centro de visitantes y comprar el pasaje, es entregado un mapa donde seguir con detalle la visita. Las vistas del mar Muerto y del entorno en general son increíbles.

Las legiones romanas asediaron la fortaleza de Masada de manera ardua y constante conquistando el territorio. Fruto de tales esfuerzos, los romanos conmemoraron la victoria con un gran arco monumental del triunfo, el gran arco de Tito.

Seguimos con los problemas para comer por el país a precios justos, algo que definitivamente es imposible. Por lo menos en el centro de visitantes de la fortaleza de Masada, hay una especie de restaurante con el típico menú de diferentes platos a elegir con una calidad y precio bastante acertada, notable relación. Estamos sobrepasando los veinte euros junto con la bebida, pero en esta ocasión es posible llenar el estomago con comida a modo de plato con ensaladas, guisos, asados, carnes, pescados y hasta cierta variedad de fruta. Todo lo que cabe en una bandeja es posible adquirir. Muy interesante esta elección, incluso bromeamos que merece la pena ir sólo a comer en caso de estar alojado por las inmediaciones.

EIN BOKEK

Uno de los momentos más esperados del viaje, es el baño en las aguas del mar Muerto, una experiencia única a la par que sana y reconfortante.

Ein Bokek es el mejor lugar para realizar esta actividad con todos los servicios disponibles y de forma gratuita, en especial con las prestaciones de duchas públicas donde desalarse literalmente y cabinas para cambiarse de ropa y colocar el mejor conjunto a modo de bañador.

Hay que seguir una serie de consejos, recomendaciones y medidas de seguridad para introducirse en el mar Muerto, bajo riesgo de ciertos problemas de salud en caso de no cumplir. Algún iluminado ha de ser incluso asistido por los socorristas, algo visible en un momento determinado de la tarde. Un grupo de peruanos estaba dando la nota.

-El día antes del baño es imprescindible no afeitarse ni depilarse. A ser posible no tener heridas recientes en el cuerpo.

-Los restos de sal en la arena son piedras cortantes y en según que temporada abrasadores, hay que proteger los pies con chanclas.

-No llevar joyas bajo riesgo de comprometer las propiedades de por ejemplo la plata.

-Nunca hundir la cabeza bajo el agua, la sal al entrar en los ojos puede provocar graves lesiones en caso de contacto continuo. Tampoco es muy inteligente tragar agua.

-Es recomendable untarse con protector solar.

-Es interesante estar hidratado y tener cuidado con las corrientes que dirigen al centro del mar Muerto.

Es importante tener sentido común y ya está. Tampoco es necesario cumplir todos los consejos de seguridad a rajatabla, todo depende también de la estación del año con más o menos calor o incluso con frío. Otra de las gracias que suele hacer el personal es comprar barro del mar Muerto en las diferentes tiendas de los centros comerciales y frotarse con tal producto en otra imagen característica para una bonita fotografía. Momentos mágicos del viaje.

ARAD

La noche del día anterior, al ir a cenar a Ein Bokek desde nuestro alojamiento en Neve Zohar, todo estaba cerrando y encima los precios descolocaban bastante, algo difícil de asimilar. Acabamos en el socorrido Mc Donald’s, aunque con un mal servicio debido a que tenían ganas de plegar. Al mediodía también comimos este tipo de comida rápida en el mismo comercio y ya alcanzamos el cupo de esta cadena alimentaria durante el resto del viaje. También es verdad que el presupuesto en comidas o cenas aumento muchos euros más por cabeza. Es lo que hay.

En esta ocasión decidimos coger el coche y la revirada y oscura carretera hasta la ciudad de Arad. Media hora de coche y treinta kilómetros para llegar a una población con cerca de 25.000 habitantes.

La ciudad a nivel turístico no tiene nada en especial, el centro principal es por calificarlo de una manera poco peyorativa, normal. Aquí sigue habiendo una colonia importante de argentinos, que por suerte una pareja nos recomienda un restaurante donde cenar. Más bien parece una ciudad antigua de los años ochenta o noventa en España, con un centro comercial espantoso.


Alerta! Israel es llamativo en todos los sentidos. Tiene una obsesión contra el mundo árabe y por tanto toma medidas para el conflicto de por vida. Para repoblar el estado, ofrece a judíos y familiares de judíos de hasta una tercera generación, vivir en Israel con ayudas económicas importantes. Estudio, trabajo y vivienda para luchar contra la natalidad de los musulmanes. Hay mucho dinero en Israel.

Pero lo importante era cenar a una hora normal en España con una buena cerveza y en este caso personal una escalopa en cuanto a comida sólida, algo muy habitual también en Israel en cualquier menú. Restaurante Muza en Arad con un ambiente animado donde el local está decorado con cientos de bufandas de equipos de fútbol. Pagar por una cerveza de medio litro diez euros es un robo a mano armada pero es así en cualquier punto del país en un restaurante.