CALA GONONE

Por suerte amanece y el mar está en condiciones idóneas para realizar una gran excursión en lancha rápida. Recibimos la llamada de la agencia contratada confirmando la salida desde el puerto de cala Gonone, así que manos a la obra. Preparamos una nevera con abundante hielo, bebida y comida junto con todos los utensilios y accesorios necesarios para estar todo el día en modo playa. Viva Cerdeña.

El patrón de la lancha, un chico joven, poco a poco va explicando detalles sobre los lugares por donde vamos pasando. A gran velocidad vamos surcando el mar prácticamente pegados a la costa y entrando en pequeñas grutas, un toque atractivo a la aventura. De aquí la gracia de contratar una lancha rápida con únicamente diez personas a bordo. En barco grande es imposible ir en paralelo a la costa.

GOLFO DE OROSEI

Primeramente encontramos cala Fuili, donde estuvimos el día anterior tomando un baño. Divisamos también la entrada a la gruta del Buey Marino, una visita necesaria y que realizamos a la tarde y a la vuelta.

La primera cala del día importante aunque pararemos a la tarde es la bonita cala Luna, con unas cuevas típicas en la pared. Pasamos también por cala Sisine y luego definitivamente hacemos la primera parada del día en la espectacular cala Biriola, con unas paredes verticales enormes.

Al ser el mes de setiembre, el turismo ha disminuido enormemente, pero queda claro que estar en solitario en las calas es misión imposible. Todo el mundo realiza las mismas excursiones aunque cada lancha tiene un itinerario distinto para no amontonarse en las calas y grutas.

Desde nuestro puesto de excepción en la arena, vamos observando el movimiento de lanchas y de alguna persona que ha alquilado una lancha (gommoni) de forma particular que tienen una odisea para entrar y salir de la cala. Hay que llegar a la orilla sin motor y con remos, dejar los bártulos y al acompañante mientras tienes faena de controlar la lancha por el oleaje. Luego hay que volver con la lancha a unos cien metros de la orilla, anclarla y volver nadando a la orilla. Y luego al salir, misma operación. Si a todo eso le sumas la inexperiencia y la presión de todo el mundo mirando, acabas liándola como más de uno incluso dando golpes a otras lanchas.

Después del tiempo libre, retomamos la marcha y llegamos a cala Mariolú, muy bonita también y al lado está la llamada cala Gabbiani, que a la vuelta y tras unanimidad, paramos en esta última para hacer la parada larga de comida y descanso. Menudo sitio.

La cala más lejana, el punto final de retorno en el golfo de Orosei, es la impresionante y destacada cala Goloritze, protegida y con acceso exclusivo a pie o nadando. El famoso arco y especie de piedra obelisco es la imagen de portada. Aquí al lado hay una pequeña playa conocida como la Sorgente, donde disfrutamos de un baño en alta mar y algunos aparecimos en la orilla. Un lugar con un agua espectacular. Incluso el patrón decidió pescar un poco para entretener a dos niñas gemelas pequeñas que formaban parte de la excursión.

El día es de los más recordados de nuestra vida viajera, no tan sólo de la visita a la isla italiana. Calas, piscinas naturales, grutas como la “Azzurra” con un agua de color azul increíble con el reflejo del sol y hasta una piedra que tenía la forma del perfil de una cara humana. La visita a la bonita gruta del Buey Marino es memorable. En las inmediaciones está la gruta del Fico, visitable también, por supuesto.

El último momento importante del día antes de regresar a cala Gonone, después de la visita a la gruta, era la parada o «sosta» en italiano de cala Luna. En la misma cala hay un río que curiosamente conecta con la gruta del Buey Marino y donde aún hay programadas inmersiones por espeleólogos profesionales para investigar las conexiones internas. Es de los sistemas de grutas más importantes de Europa.

La vuelta con la brisa marina y el sol que poco a poco perdía fuerza, es un momento muy dulce. Por la noche antes de cenar pasamos tímidamente por el centro de Dorgali a dar una vuelta pero no tiene demasiado interés. Al día siguiente cambio de rumbo para atravesar la isla hasta el oeste y más concretamente a la provincia de Oristano.


Información! Cala Gonone y el golfo de Orosei merecen una visita de manera obligatoria. Un deber realizar una excursión en lancha rápida. Es para no olvidar en la vida.