GRAN CÁUCASO


La frontera norte de Georgia con el gigante vecino de Rusia, comporta una indispensable parte del viaje por este país en cuanto a belleza natural. El Gran Cáucaso, la cordillera más alta de Europa, nace en Absajia y continua por los limites de Georgia y Rusia hasta finalizar en el mismo país de Azerbaiyán.

El paso más accesible para la gran incursión a la zona norte de Georgia, y en efecto el único, es camino de la aislada Stepantsminda, conocida también como Kazbegi. Ahora bien, apretad los machos porque la carretera es bien dura. El premio requiere esfuerzo.

En la extrema localidad de Stepantsminda, a principios de octubre, la calefacción funciona a pleno rendimiento en los hospedajes y al caer la noche el termómetro baja de cero grados. Allí tienen que alcanzar como mínimo los 30 grados negativos en pleno invierno, deben ser unas condiciones muy complicadas.

El icono e imagen cartelera o propagandística del país es el volcán extinto del monte Kazbek, con la friolera de 5.047 metros de altitud con el cono helado siempre presente. Amén de la iglesia de Tsminda Sameba, por delante del pico Kazbek y reclamo de nuevo como la mejor fotografía del país.


Información! Al leer la guía de viajes de Georgia, y una vez recorridos más de mil kilómetros por el país, es curioso pero uno entiende los problemas geopolíticos y empieza a conocer lugares que de algún modo están ocupados, divididos o hasta en conflicto bélico. Están allí mismo, Abjasia, Osetia de Sur, Nagorno Karabaj y otros tantos más que es un cúmulo de despropósitos.

CARRETERA MILITAR GEORGIANA

185 kilómetros esperan desde Gori, último sitio de descanso, hasta llegar hasta Stepantsminda a través del antiguo paso de montañas que alcanza ni más ni menos que Rusia y la ciudad de Vladikavkaz. Rozando las cuatro de horas de viaje, aunque por el camino hay varias paradas de cierto calibre para hacer la ruta más amena.

Incluido y de forma gratuita esperan ciertos sucesos rocambolescos como rebaños de ovejas ocupando la carretera colapsando el ya de por si lento tráfico, algún pequeño roce entre vehículos y en discusiones típicas entre georgianos que tienen un carácter a modo general fuerte.

La carretera Militar Georgiana en sentido norte es muy pesada, hay que mencionar que el trayecto es siempre ganando desnivel positivo, hay tramos de muchas curvas, largas rectas, espacios en obras y un tráfico descomunal. Hay un gran volumen de camiones de gran tonelaje circulando a todas horas para transportar mercaderías desde Armenia, Turquía y otros países hasta la misma y poderosa Rusia. Extenuante.

A todo esto hay que juntar las caravanas de furgonetas plagadas de turistas, simples mortales en la vida diaria y las más rápidas o aceleradas a modo de compartir transporte de «marshrutka». Encima la carretera tiene un único carril por sentido, paciencia y relax, además de mucha concentración en la conducción.

FORTALEZA DE ANANURI

Al llegar a la presa de Zhinvali, en el mismo margen de la carretera, aparece un claro ejemplo de fortaleza con arquitectura caracteristica del país. Es una popular parada en el camino, conteniendo dos iglesias, y siendo la mayor la iglesia de la Asunción. Tenemos ante nosotros la sencilla fortaleza de Ananuri, sin mucho más que destacar en general.

La mayor recompensa es ascender a través de los muros a la torre más elevada para poder admirar así unas agradables y bonitas vistas. En el mismo aparcamiento hay todo tipo de locales vendiendo recuerdos, bebida, comida y en general cualquier producto que a todo el mundo gusta mirar. Breve alto y en marcha.

PASO DE JVARI

Siguiendo con el plan original, dirección norte para esta vez seguir ascendiendo y advirtiendo ya generosos paisajes de montaña pasando primeramente por Gudauri, la población que alberga la estación más importante de esquí del país, repleta de hoteles y alojamientos. En invierno debe ser un hervidero de gente.

Desde esta población, Hay un acceso por una corta carretera hasta un monumento visible desde lejos que es el monumento a la Amistad Ruso-Georgiana, en cierta medida una broma porque las relaciones entre ambos países están más bien fracturadas por completo. Simplemente lo presenciamos desde lejos porque total es otro objeto de hormigón y quizás el único beneficio es que es el balcón al valle que veníamos ascendiendo, un simple mirador.

Finalmente si, antes del intenso y necesitado descenso definitivo hacia Stepanstminda por el valle de Tergi, paramos en los 2.379 metros de altura en el paso del puerto de montaña de Jvari o paso de la Cruz. Mucho aire, mucho frío pero unas vistas de paisajes que sorprenden y responden a la ilusión general de la planificación de un viaje.

STEPANTSMINDA

Un pueblo abierto totalmente a deportes de aventura más bien de tipo de montaña, aislado y olvidado durante muchos años, Stepantsminda o Kazbegi, nombre este último más usual, es el punto final de la jornada después de un día tedioso en vehículo.

Carretera hacia el norte es ya adentrarse en la frontera de Rusia y debería ser una alternativa apasionante con tiempo suficiente con los pertinentes permisos, que conozco a gente que ha podido pasar sin problemas aparentes cumpliendo los requisitos legales por este mismo paso terrestre.

La localidad está en plena ebullición y expansión con numerosas obras de construcciones de casas y ordenación de la vía pública asfaltando calles. En un futuro, este centro de visitantes y hasta de operaciones para explorar picos del Gran Cáucaso como el mismo Kazbek, estará muy masificado. El pico más alto de todo este descomunal espacio es el Elbrús, con los nada desdeñables 5.642 metros de altura, aunque en jurisdicción de Rusia.

Comemos en la plaza central en el restaurante Ame, la comida es muy buena, pero el servicio es demasiado lento y faltan por llegar platos. Además, una generalidad, por más peticiones o requerimientos a los trabajadores en cualquier espacio de gastronomía, los platos marchan de cualquier manera, no importa el orden. Otra mala costumbre, por lo menos de ciertas personas, no es una globalidad, es la mala educación a la hora de reclamar, simplemente giran la cara con desprecio, oscilan los brazos y dejan de hablar. Muy malas sensaciones en ese aspecto con algunos personajes de Georgia.

La pernocta queda afinada en el Alpenhaus Kazbegi, (BIEN) incluso cenamos correctamente por la noche. Con comentario en Booking en octubre ’23. La calefacción funciona a pleno rendimiento por la tarde y noche, y las vistas panorámicas son el aspecto más destacado del hospedaje. ALOJAMIENTO

Con todo esto sólo queda admirar el símbolo de Georgia y a la postre una de las estampas más fotogénicas que ofrece Georgia. La iglesia de Tsminda Sameba o de la Santísima Trinidad de Gergeti, del siglo XIV y por encima de los 2.200 metros de la población citada. El monte Kazbek, repleto de leyendas y un reto para muchos alpinistas, que quieren hacer cima en un coloso de más de 5.000 metros con el cono nevado siempre vigilante y dominante, queda alzado por detrás.

Hasta la parte alta es posible subir con vehículo pequeño sin problema, hay una buena carretera y aparcamiento de sobras, normalmente prohiben el paso a coches más grandes para así tener la obligación de subir en los taxis tipo 4X4. Hay también un par de senderos bien señalizados para subir o bajar que puede tener una duración de algo menos de una hora dependiendo del recorrido elegido. Todo el tiempo presente en ese espacio tan especial es de los mejores momentos de todo el viaje. Mucho tiempo para pensar tan arriba.

En una de las iglesias, la más erosionada, hay varias tallas, entre las que es posible apreciar el alfabeto de Georgia.

Por otro parte y justo al lado, intuimos algo que corresponde a dos ejemplares de dinosaurios con total claridad. Disfrutad del entorno, es algo único.